Blogia
La Contumancia

Amo T.V.

Amo T.V. Hoy, he descubierto que tan triste puede llegar a ser la vida del hombre postmoderno. Igual, el término postmoderno, requiere un análisis considerable, el cual creo que se obtendrá la conclusión que no lo mismo hablar de un hombre postmoderno del primer mundo, que de uno del tercer mundo. No quiero ser discriminador ni nada por el estilo, pero es evidente que uno tiene beneficios y comodidades, que el otro solo puede llegar a soñar y con suerte haber visto alguna vez en un televiso de alguna tienda.
            ¿Por qué es triste la vida del hombre post moderno? ¿Por qué he hecho este descubrimiento que para muchos puede ser no mas que una entupida obviedad?. Bueno, es muy sencillo. Me quede aislado del mundo, o eso tiendo a pensar, al quedarme sin televisión por cable, y encima sin Internet. A simple vista no parece nada del otro mundo, pero si uno se pone a pensar me estoy perdiendo de cosas maravillosas e irrepetibles, que seguro nunca mas podré recuperar tan preciado tiempo. Es decir, me estoy perdiendo la maravillosa programación de la televisión de aire de la argentina. No se que esta haciendo Tinelli, imaginate que deje de hacer la misma pelotudes de siempre ahora, o pensa que tal vez  los noticieros no bajen línea y nos muestren (o directamente no nos muestren nada) lo que según ellos es importante en el mundo. Cosas importantes como los gloriosos banquetes de la realeza para festejar sus casamientos, los cuales nos hacen pensar que ellos son superiores a nosotros porque… , bueno, justo ahora no se me ocurre un porque, pero seguramente lo debe haber. ¿Por qué ellos vana tener millones y millones de dólares en sus bancos sin hacer algo? Algo seguro deben hacer y se lo deben merecer más que el resto de los tres mil millones de almas en el resto del planeta tierra.          
            Continuando con las cosas que me debo estar perdiendo, como olvidar ese maravilloso zapping que llena de significado mi vida, que puede ser mas maravilloso que atravesar un  océano de canales vacíos y en cada cambio decir: “una mierda”. Y que mas maravilloso que descubrir que podemos re iniciar ese ciclo una vez acabado con los canales y, como en la vida, volver a entrar en el circulo vicioso, pensando que podremos cambiar nuestra suerte y encontrar algo que realimente valga la pena, por mas que sepamos que eso no va a ser así, y que estaremos ahogados en mierda, pero en el fondo sabemos que puede ser un perfecto sedante para apaciguar las pocas ganas que nos queda de vivir.
            Por lo general este maravilloso momento filosófico se da de noche. Son esas horas las cuales salimos de un poderoso imán, que tiene un flujo continuo, el cual algunos llaman trabajo, estudios, algunos lo llaman rutina y algunos que ven un poquito mas allá, le otorgan el nombre de esclavitud. Pero que extraña es la naturaleza humana con la cual nos escapamos  de un amo y tenemos la necesidad de ir a otro amo. Sin duda, muchos de Uds., estarán de acuerdo conmigo al pensar que es más triste este segundo amo, ya nos domina, paradójicamente en nuestra libertad. Triste, me duele con toda el alma ver el increíble poder que tiene ese aparato. ¡Pero como me gustaría que vuelva el cable y tirarme en el sillón a ver televisión!.

1 comentario

germen -

Hará cinco años, una verdadera figura del mundo posmoderno exclamó: "te lo juro por la televisión...que es lo que le da sentido a mi vida". Los que hemos vivido, sabemos de quien se trata.